Santander, la capital de Cantabria, situada en la costa del norte de España, es un destino turístico que combina la elegancia de una ciudad histórica con la belleza natural del mar Cantábrico. Conocida por sus playas doradas, su pintoresco puerto y su arquitectura majestuosa, Santander ofrece a los visitantes una experiencia única. Desde pasear por el paseo de Pereda, bordeado de árboles y con vistas al mar, hasta visitar el Palacio de la Magdalena, una impresionante residencia real de hace siglos, Santander ofrece una serie de lugares increíblemente atractivos.
Uno de los recursos más significativos son sus playas, como la playa del Sardinero, que da nombre también al estadio de fútbol del equipo de la ciudad, el Racing de Santander. Otras playas míticas de Santander, como la playa de Bikinis, la playa del Camello, o, la playa de Mataleñas, destacan en la costa santanderina con su belleza. La cultura y la historia están presentes en cada rincón de Santander, con el museo marítimo del Cantábrico, una ventana al pasado y presente marítimo de la región, o, el Centro Botín, diseñado por el renombrado arquitecto Renzo Piano, que se ubica en la bahía de la ciudad, como un centro de arte contemporáneo. En este artículo, veremos en profundidad los diferentes lugares que ver en Santander, que hacer en la ciudad y qué comer.
El palacio de la Magdalena
El Palacio de la Magdalena es una joya arquitectónica ubicada en la península de la Magdalena, en uno de los extremos de la ciudad de Santander. Este palacio es un símbolo de la elegancia y la historia que envuelve a esta ciudad costera, elevándose en un promontorio con vistas panorámicas al mar Cantábrico. El palacio es una mezcla perfecta de estilos arquitectónicos que lo convierten en un lugar verdaderamente icónico, un majestuoso edificio construido entre 1909 y 1912 por el arquitecto Gonzalo Bringas Vega, inspirándose en el estilo ecléctico de la Belle Époque.
Inicialmente, sirvió como residencia de verano para la familia real española, especialmente para el rey Alfonso XIII y su esposa, la reina Victoria Eugenia. El palacio se caracteriza por su diseño asimétrico, con torres y elementos arquitectónicos diversos que reflejan influencias góticas, renacentistas y de estilo inglés. Su fachada está adornada con elementos escultóricos que representan figuras mitológicas y marinas, disponiendo de jardines que lo rodean, con senderos serpenteantes, terrazas y estanques.
En su interior, el palacio de la Magdalena ofrece una mirada al pasado a través de sus salas decoradas con muebles de época y elementos históricos. El salón de baile, la capilla y otras estancias cuentan la historia de la vida aristocrática de principios del siglo XX en España. Hoy en día, el Palacio de la Magdalena se ha convertido en un espacio multifuncional, albergando parte de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, y, organizando eventos culturales, académicos y conferencias internacionales.
Bahía de Santander
La bahía de Santander es una maravilla natural en la costa norte de España, un lugar donde la belleza escénica y la historia se entrelazan de manera armoniosa. Esta bahía es uno de los tesoros más emblemáticos de la ciudad y una parada imprescindible para los amantes de la naturaleza. Con más de 20 kilómetros de longitud y una anchura que varía entre 800 metros y 5 kilómetros, esta extensa bahía es una de las más grandes de toda la costa norte de España.
Sus aguas tranquilas y profundas la convierten en un refugio perfecto para una amplia variedad de vida marina, incluyendo aves, peces y mamíferos marinos. Existe la posibilidad de coger un barco turístico con fondo transparente para disfrutar de dicha vida submarina, o, realizar un viaje que atraviese la bahía para alcanzar la veraniega localidad de Somo, en el extremo opuesto de Santander. Somo es uno de los destinos más famosos del norte de España para la práctica del surf, con olas disponibles para todos los niveles.
El paisaje de la bahía también es enriquecido por la presencia de la isla de Mouro, un pequeño islote rocoso que se encuentra en la entrada de la misma. Este islote, junto con la isla de la Torre y la península de la Magdalena, forma parte del conjunto de espacios naturales que hacen que la bahía sea un lugar de gran valor ecológico y paisajístico. También se debe hacer mención al Centro Botín, un impresionante edificio que actúa como museo de arte contemporáneo, con distintas colecciones que varían cada ciertos meses.
Playa del Sardinero
La playa del Sardinero es la playa más conocida y popular de Santander, un verdadero paraíso que ha cautivado a visitantes durante generaciones. Con su arena dorada, sus aguas cristalinas y una amplia variedad de servicios, esta playa es un lugar emblemático que combina la belleza histórica con la comodidad y el encanto de la ciudad. La playa del Sardinero se divide en dos áreas principales: la Primera playa Sardinero y la Segunda playa del Sardinero, separadas por el parque de Piquio, con sus espectaculares vistas..
Una de las características más bellas de la playa del Sardinero es su paseo marítimo, que se extiende a lo largo de toda la extensión de ambas playas, pudiendo ser recorrido a pie o en bicicleta. Además, el Gran Casino del Sardinero, un edificio elegante de principios del siglo XX, es un punto de referencia en el paseo marítimo y un lugar famoso de la ciudad. Otras playas interesantes que visitar en Santander son la playa del Camello, llamada así por tener una roca cuya forma se asemeja a la de este animal, o, la playa de bikinis, conocida de esta manera por ser el primer lugar en España en el que una mujer utilizó esta prenda de baño.
Catedral de Santander
La catedral de Santander, también conocida como la catedral de Nuestra Señora de la Asunción, es el principal monumento religioso que ver en Santander. Esta catedral se alza majestuosamente en el corazón de la ciudad, siendo un ejemplo impresionante de la arquitectura gótica. La historia de la catedral se remonta a la época medieval, aunque ha sufrido numerosas renovaciones y reconstrucciones a lo largo de los siglos debido a incendios y otros desastres naturales.
La estructura actual combina elementos góticos, renacentistas y barrocos, lo que la convierte en un testimonio visual de la evolución arquitectónica a lo largo de la historia. Uno de los aspectos más destacados de la catedral de Santander es su imponente fachada principal, que presenta una serie de esculturas y detalles ornamentales.
El interior de la catedral es igualmente impresionante, con una nave central que se eleva hacia el techo con bóvedas góticas decoradas con intrincados diseños. Los visitantes pueden explorar las capillas laterales, que albergan una variedad de obras de arte religioso, así como el coro y el altar mayor, que son ejemplos notables de la riqueza artística de la catedral. Uno de los elementos más singulares de la Catedral de Santander es su cripta, que alberga los restos de la antigua iglesia y la tumba del obispo Rodrigo, un personaje relevante en la historia de la catedral.
Museo Marítimo del Cantábrico
El Museo Marítimo del Cantábrico (MMC) de Santander es un centro cultural y educativo que ofrece a sus visitantes un profundo vistazo a la rica herencia marítima de la Comunidad Autónoma de Cantabria. Este museo realiza un repaso a la historia de la navegación en el mar Cantábrico, situándose en la antigua estación marítima de la ciudad. El MMC alberga una impresionante colección de artefactos y exposiciones que abarcan desde la arqueología submarina hasta la pesca tradicional y la navegación histórica.
Una de las exhibiciones más destacadas es la que aborda la historia de la pesca del atún, una actividad económica y cultural de gran relevancia en la zona durante siglos. Los visitantes pueden conocer la evolución de las técnicas de pesca y la importancia de esta actividad en la vida de la comunidad pesquera cántabra. El museo también dispone de una notable colección de embarcaciones tradicionales, desde botes de pesca hasta barcos de vela, que ofrecen una visión fascinante de la evolución de la navegación en el mar Cantábrico.
Además, una parte importante de la exposición se centra en la biodiversidad marina y la importancia de la conservación de los ecosistemas marinos. El MMC es un lugar donde la historia cobra vida a través de objetos históricos, maquetas detalladas y exposiciones multimedia interactivas, ofreciendo programas educativos y actividades para todas las edades.
Qué comer en Santander
La gastronomía de Santander es un auténtico deleite para los amantes de los sabores del mar y la comida tradicional del norte de España. Uno de los platos más emblemáticos de Santander son las «rabas,» calamares fritos en una fina y crujiente capa de harina, que se degustan habitualmente como raciones para compartir en los bares y restaurantes de la ciudad. Este plato se sirve tradicionalmente con limón, pudiéndose utilizar o no, dependiendo de los gustos generales.
Las anchoas de Cantabria son otro tesoro culinario de la región. Estas anchoas, pescadas en el mar Cantábrico y famosas principalmente en la localidad de Santoña, son encurtidas en sal y luego en aceite de oliva. En este caso, se pueden disfrutar solas o en tapas. Los platos de pescado fresco son una elección sabia en cualquier restaurante de Santander, principalmente en los que se sitúan en el Barrio Pesquero, uno de los barrios más famosos de la ciudad.