Bienvenidos a Pekín, la milenaria capital de China, una ciudad que fusiona su rica historia con la modernidad de la era contemporánea, y que ha servido de inspiración para grandes obras de fantasía y animes populares como Full Metal Alchemist. Con una historia que se remonta a más de 3,000 años, Pekín es una encrucijada de culturas, tradiciones y maravillas arquitectónicas que te dejarán sin aliento.

Entre los sitios turísticos más impresionantes se encuentra la emblemática Gran Muralla China, que se extiende majestuosamente por el paisaje montañoso, siendo tan icónica que se representa en cada puzzle de la muralla china. Otro lugar imperdible es la Ciudad Prohibida, un impresionante complejo palaciego que fue hogar de emperadores durante casi 500 años. Además, el Templo del Cielo, con su impresionante arquitectura y amplios jardines, es otro tesoro cultural que no te puedes perder. Pero Pekín no solo cautiva con su patrimonio histórico, también ofrece una vibrante vida moderna como la que se ve en la Plaza de Tiananmén, epicentro político y cultural, es un punto de encuentro para los locales y turistas. Mientras tanto, el Estadio Nacional de Pekín es el máximo exponente deportivo que alberga la región y que sirvió como sede para los Juegos Olímpicos de Verano de 2008.

En cuanto a la gastronomía, Pekín es famosa por su pato laqueado, un plato icónico que se sirve con finas rebanadas de carne jugosa, cebollas y salsa hoisin, envuelto en panqueques finos. También puedes disfrutar de deliciosos dumplings y una amplia variedad de platos de influencia regional que te transportarán a diferentes rincones de China. Con todo esto en mente, a lo largo de este artículo te expondremos todo lo que ver, que hacer y comer en Pekín.

Gran Muralla China

La Gran Muralla China, una maravilla del mundo antiguo y una de las estructuras más icónicas del planeta, se extiende majestuosamente a lo largo de 21,196 kilómetros, a través de escarpadas montañas y hermosos paisajes naturales. Esta impresionante obra arquitectónica, construida durante varias dinastías chinas para proteger el imperio de invasiones y ataques, es un testimonio de la ingeniería y habilidades humanas. Hoy en día, la Gran Muralla atrae a millones de visitantes de todo el mundo que vienen a maravillarse con su grandeza y aprender sobre su rica historia.

Hay diferentes secciones abiertas al público, como Badaling, Mutianyu, Jinshanling y Simatai, cada una ofreciendo experiencias únicas y vistas espectaculares. Los turistas pueden caminar por los antiguos senderos de la muralla, tomar fotografías panorámicas desde sus almenas y explorar las torres de vigilancia que se alzan majestuosamente en la distancia.

Ciudad Prohibida

La Ciudad Prohibida fue la residencia imperial de las dinastías Ming y Qing durante más de 500 años, también conocida como el Palacio Imperial en el pasado, esta majestuosa ciudad dentro de una ciudad es un tesoro histórico y cultural de China. Con sus elaborados pabellones, exquisitos jardines y numerosos salones ceremoniales, la Ciudad Prohibida es una muestra asombrosa de la arquitectura tradicional china y el esplendor imperial.

Los visitantes pueden explorar sus amplios patios y admirar el impresionante diseño de los edificios, cada uno con detalles artísticos meticulosos. La Ciudad Prohibida alberga invaluables tesoros de la historia china, incluidas pinturas, esculturas y artefactos antiguos, que ofrecen una fascinante visión de la vida en la corte imperial. Cada rincón de la Ciudad Prohibida cuenta una historia única y enigmática que transporta a los visitantes a través del tiempo a la grandiosa era de la antigua China imperial.

Templo del Cielo

El Templo del Cielo es uno de los tesoros más preciados de Pekín y una maravilla arquitectónica que refleja la rica cultura de la antigua China. Este majestuoso complejo fue construido durante el reinado del emperador Yongle de la dinastía Ming y es un símbolo importante de la conexión entre el cielo y la tierra. El diseño meticuloso y la belleza intrínseca de los edificios hacen del Templo del Cielo una atracción imperdible para los visitantes.

El Altar Circular, el Salón de las Ofrendas, y el Salón Imperial del Cielo son solo algunos de los impresionantes edificios que se encuentran dentro del complejo. Además de su impresionante arquitectura, el Templo del Cielo es un lugar de gran importancia histórica y cultural para los chinos, ya que durante siglos, los emperadores realizaban ceremonias rituales aquí para rezar por buenas cosechas y la prosperidad del imperio.

Estadio Nacional de Pekín

El Estadio Nacional de Pekín, también conocido como “El Nido de Pájaro”, es un ícono arquitectónico y deportivo de la ciudad. Construido para los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, este impresionante estadio cuenta con un diseño único y distintivo compuesto por miles de barras de acero entrelazas que crean una apariencia que se asemeja a un nido de pájaro, lo que la convierte en una de las estructuras más reconocibles del mundo.

Además de ser una maravilla arquitectónica, el Estadio Nacional de Pekín también es un importante centro deportivo y de entretenimiento, puesto que se han celebrado numerosos eventos deportivos, conciertos y espectáculos, que atraen a visitantes de todo el mundo. Los turistas pueden visitar el estadio y disfrutar de una experiencia única caminando por sus pasarelas y disfrutando de las impresionantes vistas de la ciudad desde lo alto. Por último, debemos mencionar que hay una tienda de recuerdos donde se pueden adquirir souvenirs relacionados con el estadio y los Juegos Olímpicos.

Plaza de Tiananmén

La Plaza de Tiananmén es una emblemática e histórica plaza con una extensión de 40 hectáreas, una de las plazas públicas más grandes del mundo y un valioso punto de encuentro conocido por su testimonio sobre numerosos acontecimientos significativos de China. Aquí se encuentra el Mausoleo de Mao Zedong, donde los visitantes pueden rendir homenaje al fundador de la República Popular China.

También está la Puerta de Tiananmén, un impresionante monumento que marca la entrada a la Ciudad Prohibida, el antiguo palacio imperial. La Plaza de Tiananmén es un símbolo de la identidad china y un lugar que representa la historia, la política y la cultura del país. Los turistas pueden disfrutar de paseos relajantes por la plaza, admirar los monumentos y absorber la atmósfera única que emana de este paraje icónico.

Qué comer en Pekín

Explorar la vibrante ciudad de Pekín es un festín para los sentidos, y su rica gastronomía no es una excepción, pues la capital de China ofrece una variedad de platos deliciosos y sabores únicos que deleitarán a los paladares más exigentes. Una visita a Pekín no estaría completa sin probar el famoso Pato Laqueado, donde el pato se sirve con finas crepes, cebollas y salsa hoisin. Otra delicia local es el Jianbing, un crepe chino relleno de huevo, cebollas, cilantro y salsa picante, perfecto para un desayuno rápido y sabroso.

Para aquellos que buscan sabores más atrevidos, los insectos fritos son una opción interesante y popular en los mercados callejeros. Si prefieres algo más reconfortante, prueba el Noodles Zha Jiang, una mezcla de fideos de trigo, carne de cerdo picada, pepino y cebollas. No olvides explorar los Hutongs, los estrechos callejones tradicionales de Pekín, donde encontrarás pequeños restaurantes locales que sirven auténtica cocina casera. Desde dumplings al vapor hasta exquisitos platos agridulces, la variedad gastronómica de Pekín te dejará con ganas de más.